Hola mundo.
¿Puedo jugar Xbox? Me preguntó mi benjamín. La respuesta “no” estaba en la punta de mi lengua. Los científicos y los doctores son muy claros en ese tema. Es la mañana del sábado, todavía sin desayunar, apenas lavó sus dientes. Correr a jugar electrónicos en frente de la pantalla, lo ven muy mal.
Intenté recordar mi infancia en las mañanas de los sábados. Nop, no tuve pantalla de ningún tipo. Tuve a mis padres, los que jugaron conmigo a esas horas preciosas. Ajedrez con mi padre, cocinar con mi madre. Fue otra época.
Ellos llegaron a Israel después del holocausto, aprendieron hablar hebreo en su nuevo hogar y conmigo hablaron solo ese idioma antiguo, lo cual fue dormida por dos mil años.
La idioma natal de mi padre es Italiano y de mi madre Ruso. Sin embargo, nunca jamás hablaron conmigo en Italiano O Ruso. Ni con otras idiomas que saben. En esos tiempos, los científicos y los Doctores pensaron que hablar dos idiomas a la vez con un niño pequeño es peligroso. Puede dañar su cerebro en una manera permanente. Tenían estudios para comprobar sus conclusiones. Enseñaron cómo ejemplo, que niños bilinguales empiezan hablar mucho más tarde comparable a niños normales.
Es verdad. Mi hijo es bilingual y empezó a hablar en edad de dos años más o menos. Aun, hoy día sabemos que esos científicos y doctores fueron equivocados, por no decir palabras mayores. Mi hijo bilingual tiene hoy día 17 años. Domina 4 idiomas y tiene facilidad increíble para estudiar lo que quiere. No presenta ningún daño cerebral. Tempo otros niños, los que son así.
Esos científicos y doctores equivocados de mi infancia, son los mismos que al principio del siglo pasado dijeron que fumar cigarros es muy sano para la concentración y para calmar la mente. Son ellos que dan “medicinas” para “controlar” la resistencia de la insulina, lo que muchas personas sufren en el presente y así fijan la pandemia más grande de la humanidad, lo cual mata millones de personas cada año. Son los mismos que tienen las respuestas correctas hasta el nuevo estudio y son los mismos que hablan hoy día mal sobre niños y pantallas.
Trague la palabra “no” y dije; “si mi amor”. Claro que puedes jugar, solo que vamos a bajan al jardín antes, para escoger la planta que te gusta por un teacito delicioso con algo rico antes.
Hasta el nuevo estudio, Yaron.