El secreto de los dientes

Hola mundo

Me gusta comer el mango con su cáscara.

A mi hija no.

Antes me gustaba comer solo la pulpa como una persona normal, pero hace diez año creo, me enteré del beneficio increíble para la salud, lo que contiene la cáscara del mango y probé cómo se siente comer las rebanada con su cascara. Al principio me costó y luego me acostumbré hasta que hoy día la verdad me gusta mucho. A mi hija no.

Hace unos días partí dos petacones enormes y los comimos juntos mi hija y yo. Yo obviamente lo comí con todo y cascara. Mi hija no.

Dejó su platillo lleno con deliciosas cáscaras desnudas, color verde rojo y amarillo del petacón. Viendo eso, oliendo eso, tocando  eso con las puntitas de mis dedos no pude aguantar y empecé a masticar esas cáscaras abandonadas.

Pues no. No estamos hechos para comer pura cáscara de mango. Mi muela de juicio me lo explicó fracturando al dos sin vergüenza.

No pasa nada pensé y fui a ver mis dentistas, el Doctor Carlos me dijo una semana antes ¿porqué no vas a quitar esas muelas de juicio? no son necesarias solo te genera trabajo de mantenimiento. Yo lo respondí que ni madre, que cómo crees, esas muelas van conmigo a la tumba.

Pues no. La Doctora Andrea que me reviso primero fue a consultar con Carlos y los dos como Max y Moritz, me confrontaron con la buena y la mala (soy afortunado de tener esos dos talentos dentistas a la vez) la mala me dijo Andrea, es que tu muela es irreparable porque la rompiste bien bonito, la buena siguió Carlos (con sonrisa del “te dije”) es que te la vamos a quitar ahora mismo.

Lindos esos dos ¿verdad?

En hebreo, la palabra dientes y la palabra alma las dos están hechas de las mismas letras. Ponte atención, no es la palabra diente que comparte las mismas letras si no, la palabra dientes en plural. Eso significa una conexión fuerte y significado de entre el conjunto de los dientes y el alma. Cuando pierdes un diente algo cambia en tu alma para siempre y es por eso que no quise quitarlos por mi propio voluntad pues no es buena idea quitar ningún órgano o parte del cuerpo si no existe una razón verdadera que te obliga hacerlo, porque cada parte en el cuerpo tiene su parte en el nivel espiritual como si fuera espejo. Sin embargo con los dientes es hasta más significativo porque el conjunto de todos los dientes significa alma literalmente.

Las muelas del juicio, en hebreo tienen el nombre de una esfera en el árbol de la vida. La traducción a español es la esfera de la inteligencia.  ¿Qué significa perder un diente de la esfera de la inteligencia? No lo sé, aún tengo pensamientos al respecto, los que será poco complicado compartir aquí.

Lo que si será importante compartir es: no sacan dientes si no es esencial. No quitan órganos solo por el bienestar de la cuenta bancaria de un doctor y no. No mastican cáscaras de mango por favor.

Hasta la próxima cáscara, Yaron.

El secreto de la sal

Hola mundo

Todo empezó hace una semana cuando entré a nadar en el mar de cortés. El agua se sintió calientita y tan transparente que pude ver los pececitos nadan unos metros en frente de mí. De repente llegaron como de la nada (sí, sí, el doble sentido,) unos peces mucho más grandes pintados de colores. Uno de esos comió un pez de los pequeños y eso fue lo que me hiso pensar. ¿Puede ser?

En la tarde vi un pájaro picando la tierra comiendo unos gusanos y eso levanto de nuevo la pregunta en mi mente. Para checar si mi teoría tiene tierra firme, estuve observando gracias a los documentales del Netflix los costumbres de los animales cuando comen. Vi a los leones comen una zebra, las hormigas un alacrán muerto. Vi las arañas cómo se chupan el interior de una víctima, hasta vi plantas carnívoras que comen insectos confundidos.

Después una larga investigación llegué a la conclusión que sí así es, los animales cuando comen no echan sal en su comida. Nop, en ninguna manera, en ninguna ocasión lo hacen ¿Entonces porque nosotros los humanos lo estamos haciendo? ¿Por qué no podemos comer un huevo sin bañarlo con sal? ¿O comer ensalada sin sal? Las vacas y los caballos comen verduras todo el tiempo y no tienen saleros, lo comen así cómo Di-s manda.

Te cuento algo. Nuestros riñones tienen la capacidad de manejar y sacar del cuerpo de entre 3-5 gramos de sal al día y sin embargo el consumo de sal diario en promedio esta alrededor de 8 gramos por día. Si eres de esos que comen productos procesados como el jamón, papitas, micheladas y más, probablemente estas consumiendo triple o más del promedio.

Este sal que los riñones no son capases de sacar queda en el cuerpo, en la sangre y/o en los órganos para generar un daño multisistemal. No es una sorpresa que las personas de edad de 50 – 60 años andan con presión de sangre alto. La sorpresa son los Doctores que dicen que es normal.

No es normal que la presión de sangre sube con la edad. No  es normal enfermar solo porque estas en la edad de oro. No es normal tener falta de energía, dolor en los articulaciones y estar cansado solo porque tienes 70 años y no es normal echar sal en la comida.

Si eres una persona que suda mucho por hacer ejercicio extremo o vives en zonas con mucho calor y sin aire acondicionado, puede ser que vas a necesitar enriquecer tus alimentos con minerales, los que estás perdiendo sudando. En este caso puedes consumir desde la sal del ¨Himalaya¨ y hasta el shilajit. Sin embargo, la sal blanco, lo que estamos usando toda la vida es mono mineral, el sodio, un mineral salado pero peligroso que solo nos hace daño y especialmente si lo consumes doble o más de lo que tu cuerpo puede manejar ¿verdad?

No es normal añadir sal a nuestra comida. Somos la única criatura en el planeta que lo hace. Te lo juro, lo vi en Netflix.

Hasta la próxima, Yaron.