Hola mundo
Estoy leyendo un estudio y estoy pensando, que bueno que tengo orejas, para parar la sonrisa que se está embarrando mi cara.
Gran parte de mi filosofía de vida, se está apoyando con información que tiene cientos o miles de años de antigüedad. Su fuente es desconocida. No tiene base empírico. El gran Rambam que tanto admiro y sigo sus consejos, vivió hace casi 800 años por ejemplo. Así que cuando leo un estudio nuevo que soporte mi filosofía, eso me da mucho gusto.
Este estudio que está en frente de mí rostro, intenta de encontrar que es lo que tienen en común las personas que viven más de 100 años en buena salud. No es el primer estudio que leo en ésa tema, solo que los estudios que fueron realizados hasta hoy, hablan de factores psicológicos y factores de estilo de vida, lo que tienen en común esas viejitos.
La diferencia de este estudio, es que los científicos fueron a las células y a las sistemas del cuerpo, para buscar que es lo que tienen del entro, las personas de este edad mayor, que los hacen sanos, con energía, buena memoria y en general, con un fuerte signo de vida.
Los resultados son, que todos comparten un sistema inmunológico súper fuerte. Un sistema que se desarrolló durante la vida gracias a que la persona se enfermó muchas veces y fue expuesto a miles de tipos de infecciones, batallas bacteriales y virales.
Y es en donde doy gracias a mis orejas. Siempre digo que enfermar es sano, que comer con manos sucios es sano (hasta un nivel ¿verdad?) que lavar cada cosa y mantener la casa y el cuerpo esterilice es un error. Que vacunar por cualquier cosa no sirve de nada.
El chiste en la vida es enriquecer nuestro banco inmunológico. Más datos se registran en tu banco inmunológico, más fuerte se vuelve tu sistema para la edad mayor. Si evitas enfermar, te vuelve débil y luego, tu cuerpo puede colapsar por una simple gripa que se vuelve neumonía.
Cuando mis hijos quieren visitar un amigo y sus papas me cuentan que su hijo está enfermo, yo digo que esa no es un problema y los dejo ir a visitar.
Cuando mis hijos juegan con el perro que nunca en su vida fue bañado, no lo estoy mandando a lavar las manos antes comer.
Cuando mis hijos cosechan frutas o verduras del jardín, no estoy desinfectando esas vegetales. Se los comen como Di-s manda.
Es sano ir descalzo, no es sano enjabonar el cuerpo todos los días.
No se puede esconder de la naturaleza. Uno no puede quedar esterilice para siempre. La única manera de sobrevivir después de los 100 años de vida, es por si en tu vida luchaste en muchas batallas.
Siempre lo digo y a hora es oficial.
Hasta la próxima, Yaron.