Hola mundo

Fue uno de esos días preciosos. Toda la noche llovió como loco y en la mañana, se amaneció sin ni una nube. Le gente que viven aquí están acostumbrados a esos días y no entienden que afortunados son. A mí, siempre se me deja con la boca abierta este conviene que tiene la naturaleza de esta parte del mundo con Di-s. Aprovechamos y salimos toda la familia a pasear en Amatlan y empezamos, como no, en el rio.

Cuando llegas al rio de Amatlan, lo puedes cruzar. El agua del rio cubre el camino como 10-20 centímetros y el corriente es leve, generando una cascada bonita cuando se cae un metro más o menos pasando la calle. Yo no cruce el rio. Tome a la derecha y estacioné luego luego, bajo de un ciruelo viejo que sus enormes ramas cargadas con frutas, estrechan y dan sombra a la calle, al rio y todavía más allá.

Bajamos al rio respirando aire filoso de montañas, perfumado con miles de flores y rico olor de tierra, manchado con algo apestoso por las vacas que estaban caminando de entro del rio, así para arriba. Creo que poco más arriba viven esas vacas y solo bajaron al agua para refrescar y al mismo tiempo cagar y orinar en el agua. Es impresionante como orinan esas vacas, como si fuera una llave de presión que se abrió por una emergencia. Puedo notar otro olor interesante. No está en el aire estoy pensando. El olor sale del agua. Como un perfume artificial.  Aaa sí, claro, la gente que tienen casas en la orilla del rio aprovecha y mandan el agua gris así al rio. Es el olor de la lavadora, el detergente de los lavatrastes y quien sabe que mas.

Otro coche llegó. Se estacionó en lado del mío y la pareja que salió de sus tripas siguieron nuestros pasos para el rio. Pude notar que son chilangos sin fijar en las placas. La mujer, gracias a sus altos tacones, logro llegar y con las puntitas de sus dedos, agarrar una de esas ciruelas rojas verdes deliciosas que estaban colgadas de las ramas de este enorme y generoso árbol.

Las frutas brillaban con el sol de la mañana. Toda la noche estaban bajo de fuerte lluvia cristalina y todavía cargaron una gotita de agua como una evidencia. La mujer, agarró la virgen ciruela y sin pensar dos veces agachó y la lavó muy, pero muy bien en el agua del rio. 

Le miré mordiendo la fruta y pensé, que raros son la gente y qué manera de pensar que es limpio y que es sucio. Aquí, seguí pensando, se puede ver el paradojo, pero la verdad es que en muchas casas, el agua en el tinaco no es nada mejor, primero por su origen y a veces por el propio tinaco.

En las tiendas, se vende goteros con producto para desinfectar el agua, para lavar frutas y verduras. Hay varias tipos de este producto. Lo más común es el extracto de la semilla de toronja.

Personalmente, no tengo problema con agua sucia en  mi casa, gracias a una cisterna que capta 70 mil litros de agua cristalina. Sin embargo, siempre tengo un gotero de extracto de semillas de toronja. No lo uso para desinfectar agua, sin no, como un remedio poderoso para infecciones internos como externos, para desparasitar y contra los hongos.

Para un adulto, tomar 8-10 gotas de este extracto con poco agua en ayuno, es un gran remedio contra infecciones en la sistema digestiva y si lo vas hacer por 8 días, vas a despedir de la mayoría de los paracitos en tu cuerpo. Este producto es tan poderoso, que en la homeopatía se llama antibiótico natural.

Hace unos meses, por trabajar en la tierra descalzo, se me entro un hongo bajo de la uña de mi dedo pulgar en mi pie derecho. Al principio no hice caso a esa ralla negra que se formó bajo de mi uña pero una semana después noté, que ya no es una raya, si no, una mancha negra que se crese cada día y hace su camino para la raíz de mi asustada uña.

En la alopatía se te ofrecen pastillas contra ese problema. Yo, como bien saben, no voy a envenenar mi cuerpo por un maldito hongo. Entonces empecé a aplicar en mi uña el aceite de tea tree, que es el remedio normal en la homeopatía contra esa problema.

Y si, la mancha negra se paró de avanzar, aun, no se disminuyó. Sigo ahí, necia, como si fuera su propia uña. Ya fuimos amigos la mancha y yo. Cada mañana tomamos juntos. Yo tomaba mi café y a ella le di su dosis de tea tree. Platicamos de los deberes del día y en la noche yo tomaba mi tea de canela y ella otra vez su tea de tree. La acariciaba, y fuimos a dormir juntos. Yo bajo de la cobija y ella, calientita, bajo de mi uña.

Así pasaron las semanas hasta que noté, que mi pareja se empieza a poner celosa con mi nueva relación. A veces se me olvidó a preparar café a mi pareja con tanto de tomar mi café con el tea de mi mancha.

Mi pareja, desperrada, platico de mi nueva amiga con su amigo podólogo y el la dijo; oye, regala a la mancha de tu pareja una botella de extracto de semillas de toronja y salva tu relación.

Así fue. Empecé a aplicar este extracto porque mi pareja me lo ofreció, diciendo me, es o ella o yo y si, cada día la mancha se disminuyó, volviendo más y más pálida, hasta que un día se desapareció.

Para mí, el botiquín de cada casa debe de tener una botella de esa maravilla. Tomándolo, me van a odiar, porque es la cosa más amarga que existe en la tierra. Sin embargo es un remedio poderoso que te puede salvar de las uñas de la alelopatía.

Sigo platicando con mi uña en las mañanas aun ella ya no está, pero creo que es una tema para otro post. Hasta la próxima. Yaron.