Hola mundo.
Esta semana, en mi bosque, parecieron escenas como en las películas del Emir Kusturica. De entre los arboles, de repente pasaron dos personas con una lavadora, cuatro personas con un refrigerador y muchos muebles brincando de entre el verde vegetal.
Al fin nos mudamos.
Durante unos años estuve construyendo mi casa en el bosque. La hice de estructura de metal, madera y vidrio. Todavía no la terminé, pero ya supero a la antigua casa. Así, como agua que siempre fluye de un lugar alto a un lugar bajo por la gravedad, igual nosotros, fluimos esa semana a la casa nueva por acomodad.
Que difícil es mudar. Físicamente como mentalmente. Físicamente es bastante obvio. Empacar tus años en cajas es un trabajo duro, ni hablar de cargar todo eso al nuevo lugar y desempacar. Sin embargo, la parte mental es mucho mas difícil. Lo veo con los niños más que nada. De un lado están felices, orgullosos, emocionados. De otro lado, ver como se desarma tu cuarto, perder tu espacio que tanto te acomodó y salir a un lugar nuevo, no es fácil.
El alma vive en el cuerpo, el cuerpo vive en un hogar. Por esa lógica se puede decir que el alma vive en el hogar. El alma no puede mudar de su cuerpo. Mudar del cuerpo significa morir. Es por eso que el alma siente tan incómoda cuando el cuerpo se deja su hogar por otro. Es un acto anormal para el alma y es la razón que mudar es tan difícil mentalmente. Como adultos, podemos controlar este conflicto con razonarlo pero a los niños el efecto es mucho mas fuerte.
Lo primero que estrene en la casa nueva fue, claro, la cocina. A los actores de la película que cargaron mis pedacitos de vida a la casa nueva, hice mole.
Cuando tienes que cargar algo, mas pesado es, mas difícil cargar lo. Pero llega un punto en donde la pieza es tan pesada que ya no es nada difícil cargarla, porque contrata unas personas que te ayudan jajaja. Pues, lo mismo es con el mole. Es un platillo tan laborado de preparar que ya no te cuesta tiempo de hacerlo, se compra la pasta hecha, la mezcla con caldo de pollo y listo.
Una vez en mi vida cocine el mole del principio. Fue cuando nació mi primer hijo. Pase toda la noche con la partera y claro que hablamos de comida. Yo prepare esa noche comida mediterránea y angelina (la partera), me conto lo secretos del mole. Una semana después fui al mercado y compré todos los ingredientes para hacer el mole. Una cosa que dudo si lo voy hacer otra vez. Es el platillo mas elaborado que cociné en mi vida.
Hoy, cuando preparo el mole, simplemente compro la pasta hecha. De los comerciales, para mi, la marca Mayordomo, tiene el mejor producto. En los mercados se puede encontrar pastas mas artesanales. Es pregunta de pellizcar esas montañas de pasta de mole y probar su sabor para encontrar la pasta que mas te gusta. Luego, prepara un buen caldo de pollo y mezcla con la pasta hasta que llega a la consistencia adecuada. Me gusta mejorar el mole con un toque personal. Pongo almendras molidas, chocolate rico y mas chile porque las pastas que se compra nunca pican suficiente para mi. Hay personas que ponen jitomates cocidos o plátano.
Hoy es nuestro primer fin de semana en la casa nueva. Estoy pensando que cena espectacular puedo preparar para esta noche tan especial. Todavía no he decidido, pero prometo subir las fotos en mi muro
Hasta la noche Yaron