Hola mundo.
Saben, yo no tengo tarjetas de presentación. No publico mi servicio en Facebook o en otros medios. De hecho, no tengo ningún método de publicación. La gente que me llama por una terapia, se enteró de mi existencia porque alguien se lo recomendó. Así de simple.
Tampoco tengo un consultorio. Antes, el sanador, curador y luego Dr, se fueron a las casas de la gente enfermas para curar los. Hoy día, en la época moderna eso no es posible. El Dr. tiene que ver una cantidad grande de pacientes al día para mover la economía. En eso, se perdió el contacto personal de entre el Dr y su victima, a veces ni se miran a los ojos.
Doy mis terapias a domicilio. si alguien tiene que pasar una hora en el trafico para tomar la terapia y otra hora para regresar a su casa, se pierde un gran parte del beneficio. Además, no quiero ver muchas pacientes al día porque me importa el vinculo, el contacto y la amistad. Algo que me permite entrar al mundo personal quien que me necesita, buscar e intentar de curar lo que molesta de la raíz.
Si no puedo entrar al mundo de la persona que me llama, si su esencia me rechaza en una manera que no lo puedo amar y entender. Lo dejo. Algo que me pasó muy poco en los 35 años de mi carrera como terapeuta, gracia a Di-s.
En el otro extremo están las personas que cuando llego a su casa y me abren la puerta, con el paso que doy para cruzar la, me caigo como di un paso por la puerta de un avión sin paracaídas. Me caigo sin tiempo, expando en los espacios del alma que me abrió la puerta como fue un viejo amigo del preescolar. así exacto me paso hace unos años.
Entré al elevador y esperé que me jalan. Un truco de seguridad me imagino, para que no cualquier va a poder subir a los departamentos. A veces es incomodo porque hasta que te jalan, otra persona pide el ascensor. Te baja al estacionamiento o te sube a otro piso. Se siente ridículo. Pero esta vez en ascensor subió a su destino. Fue de esos departamentos que la puerta del elevador es la puerta de la casa. Cuando se abrió, me reveló una casa roja. Paredes, objetos, todo en tonos de rojo de buen gusto. En el centro de todo ese rojo, encontré en frente de mi una mujer de edad poco mayor que yo. Cuando terminó de saludarme con su acento francés, ya estuve bien lejos del avión jajaja. Instantemente volvimos amigos.
En este mismo día, me regalo una cajita llena con bolsas de tea, lo que trajo de su ultimo viaje a Francia. La palabra “tea” se relaciona inmediatamente con Inglaterra. Los ingleses, cuando llegaron a china y descubrieron la tea, quisieron llevar lo a su tierra. En esa época no tenían manera de conservar la tea en su forma verde, entonces lo quemaron y lo volvieron a su forma tan conocida, el tea negro. La nueva bebida se adoptó en Inglaterra y volvió un símbolo de su cultura. Siempre pensé que la tea ingles es la mejor tea del mundo hasta este día, que probé la mejor tea de mis vidas. La tea que me regalo mi nueva amiga mexicana francesa.
En todo el mundo la gente prepara bebidas con plantas, flores y frutas. En china es con la planta de la tea, en sud américa es la mate, en el mediterráneo tenemos el sajleb, los hindús el chai y bueno, creo que se puede escribir un libro bastante gordo de todos los tipos de esa maravilla manera de aprovechar las esencias de las plantas.
Tomar fusión de hierbas es una manera excelente de reforzar el cuerpo. Dicen que hay plantas medicinales, pero eso no es verdad. Todas las plantas son medicinales. Cada planta tiene un ángel que la ordena crecer. Por el problema de salud que estamos confrontando esos días, creo que la mejor fusión para reforzarnos sería el chai.
Se puede dividir las plantas a dos grupos. Las frías y las calientes. Por ejemplo, la menta, hierbabuena y anís son de los fríos mientras la canela, pimienta y jengibre, son del grupo “caliente”. El Chai es una fusión que esta hecha con mezcla de plantas calientes. Ayuda a reforzar el sistema inmunológico y luchar contra infecciones en el cuerpo. Por lo cual es tan recomendable tomarlo en estos días.
Aquí los dejo mi receta para un chai poderoso y curativo:
Una acuchara de Jengibre lavado y picado sin pelar. Una cucharita de cúrcuma lavada y picada sin pelar. dos cucharita de tea negro de preferencia Earl grey. Media cucharita de clavos. Media cucharita de cardamomo. Una barra de 10-15 centimetros de canela pimienta negra generosamente. un litro de agua.
Pones todo en el fuego hasta hervir, apaga el fuego y deja lo a reposar unos diez minutos. Se puede endulzar con miel de abeja o con miel de abeja. Hay gente que ponen poca leche antes servir. Personalmente creo que eso se merece cárcel, pero bueno, si eso te hace feliz, hazlo :-).
Si alguien va a Francia, avispanme. Hasta la próxima
Yaron.