Hola mundo
Se fue la luz. Otra vez. Y es solo nueve y media de la noche. Cuando la luz se fue, hace una hora más o menos, estuve lavando los trastes mientras los niños cenaron alrededor de la mesa. Ahora están en las camas escuchando un cuento que lee su mamá. Un silencio de bosque cobija la casa, bailando con sombras de velas.
Durante la mayoría de la vida humana, así fue. La luz artificial eléctrico es nuevo relativamente y la luz de led hasta más.
Todo lo nuevo tiene un precio en nuestra salud. No es malo ni bueno, simplemente, por tener un beneficio de la novedad, estamos pagando con nuestra salud. La novedad es al instante, pero el organismo necesita generaciones para adaptar a cualquier cambio, y cualquier proceso de adaptación involucra sufrimiento. Por ejemplo, si vamos a mudar una familia con piel negra a la Antártica, con las generaciones, la piel de los que van a nacer, se va a volver blanca. Un proceso que durara veinte mil añitos aproximadamente. En estos veinte mil años, los miembros de la familia van a sufrir enfermedades que tienen que ser con falta de vitamina D y minerales. Si vamos hacer el mismo experimento con familia de piel blanca en África, lo mismo va a pasar, solo que las enfermedades serán cáncer probablemente.
En el tema de la luz, hay muchos estudios que enseñan el mal efecto de estar con luz artificial especialmente cuando afuera ya es noche. Algo que todos estamos viviendo. El efecto es sobre el reloj biológico, metabolismo, estrés mental y otros efectos interesantes. Últimamente, estamos usando más y más la luz de una nueva forma energética. La luz de led. Es una tecnología que ahora energía tremendamente, así que todo el mundo cambia los viejos focos baratos con la carísima novedad, lo que al fin te sale más barato. ¿Pero cuál es el efecto sobre nuestro salud?
La luz natural, primero, contiene toda la gama de las ondas. Segundo, en el día, la combinación de la intensidad de las ondas cambia. Hasta el mediodía, la luz azul es más dominante mientras que luego, la luz rojo se gana y su fuerza sube hasta el atardecer. Nuestro metabolismo está ligado con este proceso. La luz azul acelera nuestro ritmo mientras la luz rojo lo calma. La luz artificial no tiene este juego y su gama de ondas no es amplia. Pero la luz de led es un desastre para nuestro cuerpo porque ni tiene gama. Es por eso que es tan eficiente en energía. No son muchas ondas que generan una gama de luz, es una onda fuerte.
Como la luz de led es de una onda, se puede elegir su color. En la mayoría, se elige la luz blanca que en realidad es luz azul y por ser solo una onda, es cinco veces más fuerte de la luz azul que tienen los focos viejos. Eso genera una aceleración significante en muchos procesos en el cuerpo, especialmente si la persona está bajo de esta luz en la noche. Resulta en problemas de digestión, estrés, insomnio y más. La gente se vuelve neurótica, sin paciencia. Se nota en las carreteras, en el trabajo y hasta las relaciones de entre las familias.
La American Medical Associatión (AMA) que se reúne cada año en estados unidos, adoptó una guía para las comunidades acerca da la iluminación de led en las calle. En la reunión se demostraron estudios que enseñan los efectos nocivos de la luz led sobre los conductores de coche. Así que imagínate el efecto sobre una familia en su casa.
¿Cómo podemos minimizar el efecto?
- Usar en la casa luz de led cálido.
- Reducir las luces lo más posible después del atardecer.
- Combinar otro tipo de luz que no sea luz de led.
- Tomar un baño de sol cuando se puede, aun si es en la azotea.
Y perdonar el neurótico conductor que toca su claxon antes que el semáforo se vuelve verde, por no leer mi blog.
Hasta la próxima, Yaron.